martes, 10 de abril de 2018

EL LIBRO DE JUAN FRANCISCO (Parte 7) Facundo Cabral. Transcripción Juana Macedo

A todos nos es dada una tarea que tu corazón conoce o conocerá, la vida no deja a nadie desocupado y cuando la ejecutes, es decir, cuando estes en lo amado serás libre y por lo tanto feliz, tan feliz como yo al compartir el mundo contigo. Todo parece muy complejo pero todo es simple Juan Francisco como una historia.

Me enamoré de los libros que me enamoraron del mundo donde vivo, el mundo lleno de tesoros, de maravillas como el oro, que para los incas era la sangre del sol, el mundo donde no está prohibido que te caigas, pero si que no te levantes. 

Pero antes de los libros fueron las historietas que alimentaron a mis sueños, principalmente el Corto Maltés, incansable viajero que tenía aventuras de puerto en puerto, entre contrabandistas, princesas y brujas que podían cambiarlo todo con hierbas que les llegaban de islas lejanas. Las revistas donde se contaban las aventuras del Corto Maltés llegaba a mi pueblo una vez por semana y yo la esperaba en la estación de trenes con tanta emoción como vos esperas las películas de Harry Potter.

Unos años después casi jugando, yo anduve por esos puertos gracias a la canción que abre todas las puertas, por esos puertos y por los ríos que alimentan a esos mares, y por los valles y las montañas y me perdí por monasterios y castillos en aventuras como le había envidiado al Corto Maltés y crucé antiguos puentes de piedra y acueductos romanos y escuché emocionado a Homero en la Plaza de Atenas, el viejo ciego que de vez en cuando volvía de la muerte, como el Dante que me esperaba en Florencia. Y fue tanto lo que vi y escuché que ahora me escuchan en todas partes, porque quieren saber que encontré en las Islas del Pacífico y del Amazonas, en Gibraltar, en Singapur, en la meca del profeta Mahoma que como Jesús descendía de Abraham, la Meca es la ciudad santa de los Musulmanes, la patria de Mahoma y está en Arabia Saudita y Abraham fue un patriarca hebreo, nacido en Ur Caldea venerado por judíos, cristianos y musulmanes que de su esclava Agar engendró a Ismael Padre de los árabes y de Sara a Isaac patriarca hebreo... (Sigue 8)

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